Dicen

La vida sigue, dicen las ligeras lenguas.
Ya sé. Como si acaso se hubiera parado.
Como si pudiese haber tregua.

Es un fluir constante de una fuente inagotable.
Para bien o mal, no deja de desbordarse a borbotones,
en forma de amores, luchas y hambre.

Pero no podemos retener ese agua que sale, ni ajustar la manivela.
De poco servirá que juntemos nuestras manos para intentar hacernos con toda ella.
Ni mucho menos si, por el contrario, queremos taponarla a base de fuerza.
Porque lo hará siempre a su ritmo. Y a su manera.

Es una gran cascada que nos invade y nos lleva.
Y es que es así.
La vida sigue.
Y, lo quieras o no, tú con ella.

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Mi hermana y yo, de chinijas 🙂

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* A esta niña que miro, remiro y admiro, en esta foto y fuera de ella, le debo un cuarto de libro, un par de poemas, un discurso muy largo y toda una vida a medias.

Quierote fleje. Que vengan todas las etapas, y nosotras juntas.

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_Llaysha_